Comprar una casa es una experiencia muy emocionante y probablemente tú y tu pareja estén ansiosos por comenzar el proceso. Es posible que ya tengan una idea de la propiedad, incluso sobre las zonas residenciales que más prefieran.
Pero, te has detenido a preguntarte: “¿dónde realmente debo vivir?”, ¿cuál es el lugar que más me conviene? Esto es algo importante en qué pensar antes de comenzar el proceso de adquirir una casa.
Si no están seguros de qué buscar en un vecindario o en las zonas residenciales, aquí hay algunas cosas que deben tener en cuenta para encontrar ese lugar ideal.
Zonas residenciales: elegir dónde vivir es elegir cómo vivir
Elegir las opciones adecuadas entre las zonas residenciales es una de las decisiones más importantes que tendrás que tomar como pareja, por muchas razones. Cuando se adquiere una casa se debe pensar en el futuro porque se supone que pasarás gran parte de tu vida en ella.
Si no tienen hijos, pero piensan hacerlo, también es un punto a tomar en cuenta, ya que es lógico que se quiera que ellos tengan acceso a una buena institución educativa y todas las comodidades, por ejemplo.
La casa de tus sueños es importante, pero la zona residencial donde se localice lo es aún más. Investiga primero sobre el lugar.
Recuerda que ese espacio será tu morada, el lugar donde vas a descansar luego de un arduo día de trabajo. Así que cada aspecto del entorno estará siempre presente. Por ello, las zonas representan el punto principal a elegir, incluso, por encima de la propiedad.
5 aspectos a tomar en cuenta al elegir entre zonas residenciales
Es fácil quedar atrapado en la búsqueda de una casa que cumpla con todos tus deseos, ¿y qué hay de la colonia? Después de todo, una casa puede repararse y remodelarse, pero no puedes cambiar su ubicación, el ambiente de la comunidad, ni a los vecinos.
Como pareja, deben tomar en cuenta que no solo están comprando una propiedad, sino que están invirtiendo en un proyecto. Por lo que hay que tener sumo cuidado al elegir las zonas residenciales donde se desea asentarse. Atento a estos aspectos:
1. Considera la vialidad y los medios de transporte
Si el transporte público será la forma de traslado al trabajo, la accesibilidad a las vías de tránsito y un servicio óptimo es importante. ¿Hay transporte disponible? Durante las horas pico, ¿con qué frecuencia hay tráfico?
Si necesitas acceso al aeropuerto, ¿a qué distancia está el viaje? ¿Cuál es el costo de contratar un taxi? ¿Es el transporte público la mejor opción? Hazte estas preguntas.
Si la casa no permite tener acceso a una buena vialidad o transporte público lo más probable es que no sea la mejor opción. Ni siquiera porque el precio se encuentre por debajo de la media pues, a la larga, los costos de vida pueden ser elevados.
2. Infórmate acerca de la calidad de los servicios
De esto dependerá en gran medida tu calidad de vida y la de tu familia. ¿Qué tan buenos son los servicios básicos en esas zonas residenciales? ¿Cómo es el funcionamiento del sistema de agua, gas, electricidad, cable e Internet?
Con un vecindario que tenga deficiencia en estos servicios, lo más seguro es que no te brinde las comodidades adecuadas. No querrás pasar tus días sin luz, por ejemplo, o sin agua.
Por eso, la recomendación es optar siempre por zonas residenciales que cuenten con varios proveedores para que puedas elegir el que mejor preste los servicios y sea reconocido dentro de la comunidad.
3. Conoce acerca de los impuestos
Las personas a menudo optan por incluir el costo de los impuestos sobre la propiedad en el pago de su hipoteca cada mes. Sin embargo, los impuestos pueden aumentar con el tiempo.
Al elegir un vecindario, debes observar el promedio de impuestos a la propiedad del área durante un período de varios años para ver cuánta fluctuación se ha producido.
Los posibles impuestos también deben tenerse en cuenta si te mudas a un vecindario más nuevo y en desarrollo. A medida que se construyan más casas y los servicios públicos estén disponibles, el valor de las propiedades aumentará y los impuestos, como el predial, también pueden hacerlo.
4. Considera tu personalidad al elegir entre zonas residenciales
Tu personalidad y forma de vida como pareja, son un factor esencial en la elección de las zonas residenciales donde has de comprar la vivienda. Si te gusta una vida ajetreada y bulliciosa, quizá lo tuyo sea la ciudad. En cambio, si quieres algo más relajado y tranquilo puedes optar por las zonas conurbadas.
Te recomendamos averiguar previamente sobre el estilo de vida de las diferentes zonas residenciales que tienes en mente. Si es posible, haz un recorrido previo.
5. Investiga sobre los precios de las casas en las zonas residenciales
Las mismas características que hacen que un vecindario sea deseable también pueden hacer que aumente la demanda y los precios de sus viviendas.
Si esto te sucede mientras buscas una casa, es posible que debas dar un paso atrás y reconsiderar tu enfoque. Dar prioridad a tus “imprescindibles” hará que el proceso de decisión sea mucho más fácil en el futuro.
Elegir el vecindario correcto es una parte importante del proceso de compra. Ten en cuenta el transporte, los servicios públicos y hasta tu estilo de vida, para decidirlo.
También debes trabajar con tu agente de bienes raíces y tener una idea de qué tan competitivo es el mercado inmobiliario en el área. ¿La gente ha tenido que esperar meses, un año o más para comprar propiedades en esa colonia?
Conclusión
Tener en cuenta estos aspectos que te presentamos te ayudará a elegir entre las zonas residenciales que más te convengan. De esta forma, podrás tomar la decisión correcta.
Conduce por los alrededores, investiga por Internet, habla en confianza con tu agente de bienes raíces. Infórmate con los vecinos para tener un mejor acercamiento y una idea clara de dónde comprar tu vivienda.
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